El líder espiritual de Irán, el ayatolá Alí Jamenei, ha hecho preparativos inusuales en la guerra con Israel. Su miedo a un intento de asesinato va tan lejos que ya ha planeado su sucesión. No es de extrañar que el hombre al frente de Irán esté nervioso. Irán e Israel han estado en guerra desde el viernes pasado. Al parecer, Jamenei supone que Israel o Estados Unidos podrían intentar matarlo.
El líder espiritual vería esto como la muerte de un mártir, dijeron tres funcionarios iraníes de alto rango al New York Times. Por lo tanto, el hombre de 86 años instruyó al comité clerical para que nombrara rápidamente a un sucesor para él, de entre tres clérigos seleccionados por él. Pero el líder conservador también tomó medidas en caso de que alguien de su cadena de liderazgo militar fuera asesinado.
Él elegía quién debía ascender si lo peor llegaba a lo peor. "La máxima prioridad es la preservación del Estado" El hecho de que Jamenei designe a tres posibles sucesores para sí mismo es un procedimiento inusual. Normalmente, un proceso de este tipo lleva meses y el clero elige a alguien de sus filas para que asuma el liderazgo. Sin embargo, Jamenei quiere asegurar un cambio ordenado a nivel de liderazgo lo más rápido posible ahora que Irán está en guerra, dijeron los funcionarios.
Además, para el líder espiritual es importante preservar su legado. "La máxima prioridad es la preservación del Estado", dijo el experto en Irán y profesor de asuntos internacionales Vali Nasr. "Todo es calculador y pragmático", dijo al New York Times. No se sabe quién podría seguir los pasos del líder espiritual. Pero no se dice que el hijo de Jamenei, Mojtaba, también clérigo, esté entre ellos.
La sucesión del hombre de 86 años es un tema extremadamente delicado que rara vez se ha discutido seriamente en el pasado. Irán se prepara en silencio Mientras Trump todavía está considerando si intervenir en la guerra entre Israel e Irán, los altos funcionarios de Irán se están preparando discretamente para varios escenarios, dijeron los funcionarios.
A pesar de la tensa situación en Irán, es probable que la cadena de mando siga funcionando y no hay señales evidentes de que los conflictos estén creciendo en el aparato de mando del país. Al parecer, el propio Jamenei vive en un búnker. Por temor a un intento de asesinato, se comunica con sus comandantes principalmente a través de un confidente y ya no a través de medios electrónicos. Desde el comienzo de la guerra, ha habido dos mensajes de video del líder espiritual. "El pueblo iraní se defenderá de una guerra forzada", imploró a la población.